
Pixar se fundó como The Graphics Group, (Una división de Lucasfilm) que se lanzó en 1979 con la contratación del Dr. Ed Catmull del Instituto de Tecnología de Nueva York (NYIT).


Dr. Ed Catmull

En NYIT, los investigadores trabajaron en una película experimental llamada The Works, aunque nunca fue estrenada. Cuando el grupo se independizó de LucasFilm, el equipo trabajó en crear al precursor de RenderMan, llamado Motion Doctor que les permitió a los animadores del cel tradicionales trabajar con la animación de la computadora con un mínimo de experiencia.
Seguidamente, el equipo empezó trabajando en las sucesiones de cualquiera de las películas producidas para Lucasfilm o en las películas con Industrial Light & Magic. Después de años de éxito en notable investigación, e hitos importantes en las películas como en Star Trek II: La ira de Khan y Young Sherlock Holmes, el grupo fue comprado en 1986 por Steve Jobs poco después que el dejó Apple Inc. (el fundó esta compañía con Steve Wozniak), estaba buscando algo que hacer con su dinero (Jobs retornó a Apple en 1997, después de su adquisición de NeXT). Él pagó US$5 millones a George Lucas y puso US$5 millones como capital en la compañía.





La venta reflejó el deseo de George Lucas de detener las pérdidas del flujo de liquidez asociadas a sus proyectos de investigación de 7 años sobre nuevas herramientas tecnológicas de entretenimiento, así como un nuevo enfoque de su compañía en crear productos de entretenimiento en lugar de herramientas. Un factor que contribuía era dificultades del flujo de liquidez que seguían el concurrente del divorcio de Lucas 1983 con la separación de Lucas frente a la coexistente gota súbita fuera de los réditos de Star Wars sobre las licencias que siguen al lanzamiento de El regreso del Jedi. La compañía recientemente independiente se encabezó por Dr. Catmull, Presidente y Gerente, y Dr. Alvy Ray Smith, Vicepresidente Ejecutivo y Director. Los trabajos sirvieron como base del presidente.
La venta estuvo basada en el deseo de George Lucas de ver a Pixar tener éxito propio, pues no podía brillar estando a la sombra de Industrial Light & Magic.
En 1986 y tras el éxito de su primera incursión, Pixar desarrolló Luxo Jr., en el que las líneas básicas y los movimientos fueron pulidos. Luxo es actualmente la mascota de la compañía: un flexo que sustituye la letra “I” de “PIXAR” en la presentación de todas sus creaciones.



En 1987 se produjo el corto Red’s Dream, con el que se llevaron a cabo los primeros experimentos con la animación nocturna, la lluvia y las expresiones humanas.
La etapa de cortometrajes se vio interrumpida cuando en mayo de 1991 Pixar y Disney unieron fuerzas mediante un contrato en el que se estipulaba la realización de cinco largometrajes. Según esto ambas compañías compartirían gastos y beneficios a partes iguales donde Pixar obtenía además de parte de las ganancias, que su nombre figurara como “realizadora” pero no como propietaria.


La primera en ver la luz fue Toy Story, dirigida por el mismo John Lasseter antiguo trabajador de Walt Disney, recibiendo un Oscar especial por la primera película animada de la historia: Toy Story. Fue la película más taquillera de 1995 recaudando más de 360 millones de dólares, además de ser el primer largometraje de animación integral por ordenador y la primera película digital en recibir un Oscar.
Con Monsters, Inc.(considerada por muchos el mejor film de Pixar hasta la fecha) transformó en imágenes la perfección. Los 2.320.413 pelos de Sully hicieron temblar de nuevo las taquillas y alzar a Pixar a lo más alto del panorama cinematográfico. El proceso digital. Todo comienza con el planteamiento de las diferentes posibilidades y su enfoque narrativo. En 2004 Pixar y los estudios Disney rompen relaciones.

El 24 de enero de 2006 Disney adquiere Pixar Animation Studios por 7.400 millones de dólares y cede el control de su estudio de animación a los directores creativos de Pixar. Steve Jobs se convierte en uno de los mayores accionistas de Disney.

Sin embargo como el intercambio de activos es una operación de Disney y Pixar, decidieron extender su contrato de distribución hasta 2007 con una sola producción, "Ratatouille" que únicamente se basa en el pago de honorarios a Disney además de la mención como distribuidores, mientras que Pixar absorbe el gasto de la producción del filme y conserva los derechos. Esto como una previsión en caso de que la fusión falle, ya que automáticamente al finalizar la compra, los derechos de los personajes pasan a ser propiedad de Disney.
